Al poco de morir Víctor Rodríguez Martínez, se dio a conocer su santa vida, especialmente en el ámbito del Carmelo Descalzo Seglar, al que perteneció. Pero también entre los miembros de la Adoración Nocturna, que tanto le ayudó a alabar a su íntimo amigo Jesús, entre los miembros de la Congregación de San Felipe Neri y entre los Cursillistas de Cristiandad, que tanto promovió, especialmente entre sus compañeros de la fábrica Embotelladora de Pepsi-Cola.
El impacto que fue produciendo en la gente el conocimiento de su vida y virtudes partió de una sencilla estampa con la figura y oración a Víctor, que sirvió a mucha gente para elevar el corazón a Dios y pedirle por su intercesión favores, que con mucha frecuencia han visto realizados.
En este folleto se resume la vida del Siervo de Dios Víctor Rodríguez Martínez, destacando algunas de las facetas que el autor considera más interesantes para los laicos que, como él, quieren ser fieles a la Iglesia y cumplir la voluntad de Dios.
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