El deber de un padre siempre es difícil de asumir, y más cuando se trata de la educación de los hijos. No solo debe sustentar económicamente, debe ser el apoyo y guía de la próxima generación. Para esto, tanto el padre como la madre deben enseñar a sus hijos a ser respetuosos y obedientes (Efesios 6: 1-3).
Podemos decir que las enseñanzas que transmitimos a nuestros hijos ya fueron inculcadas previamente por nuestros padres. De hecho, la institución de la familia por parte de Dios también involucra el encargo del cuidado de los hijos por parte de los padres (Colosenses 3:20).
Aprenda más sobre la educación de los hijos
¿Cómo gestionar la educación de los hijos? Realmente es difícil abarcar todos los deberes de los padres. De hecho, es con la experiencia que se van conociendo todos los datos importantes para eso. Algunos consejos son los siguientes:
- Debe mantener un contacto constante con sus hijos para fomentar la comunicación. Hábleles, pregúnteles cómo están, manténgase informado acerca de sus vidas.
- Muéstrese como una persona abierta a escuchar. Un hijo no confiará en su padre si no hay comprensión y empatía sino por el contrario se escandaliza por cualquier cosa.
- También es importante estar al pendiente de los peligros que hay en la calle y que pueden poner en riesgo a sus hijos. Aquí la honestidad será su mejor aliada. Después de todo, siempre van a haber depredadores sexuales, delincuentes y vendedores de sustancias ilícitas.
- Fomente la educación de sus hijos en los valores. La Biblia es la encarnación de la Palabra de Dios y en ella puede encontrar muchas formas de abordar este tema. Por esto, Dios es importante en la familia.
